Pornografía
Las historias se escriben solas, leemos en esta novela corta. El autor «lo único» que hace es levantar acta, presentar las pruebas, redactar un informe, con más o menos pericia y fidelidad a los hechos. Los hechos están formados por recuerdos, por sueños, por lecturas, por citas, sin relación aparente entre sí, y sin embargo…
«Quisiera poder escribir una historia sencilla, un idilio, un relato de un centenar de páginas. Algo parecido a Así que usted comprenderá de Claudio Magris, ni siquiera tiene el centenar de páginas, pero qué intensidad, qué emoción. Orfeo sigue enamorado de su Eurídice. Mi relato es distinto al de Magris. Sus páginas cuentan la historia de un amor. Las mías, sin embargo, forman parte de la historia. Porque no se puede escribir mientras suceden los hechos. Lo que se escribe mientras suceden los hechos es también un hecho. Las palabras también son hechos. Y necesitamos encontrar un sentido a todo lo que nos ha sucedido.»
¿Pero quién puede decir que comprende el porqué de todo lo que le sucede?
«Ella odiaba los diminutivos. No sudaba nunca. Tenía unos pies aristocráticos.»
Una primera novela tan breve como fecunda.
«Quien ama es implacable, no deja pasar ni una.»
Leído en la prensa
«Una nouvelle que sabe sortear el peligro de la levedad excesiva, algo que casi nunca consiguen determinados autores contemporáneos de ese género, que rara vez superan lo anecdótico. No así Pascal Quignard, muy aludido y citado en Pornografía, que siempre ofrece belleza y poesía a quien lo lee. Si Quignard (junto a Así que usted comprenderá de Claudio Magris) era el modelo reconocido para Arranz, entonces su experimento ha sido un éxito.» Juan Marqués, ABC
«Es el dietario de un hombre que añora a una mujer. La herida de una ausencia, viva, cortante, que le apremia para replantearse la propia vida. […] El hombre que lo escribe persigue un sueño, reconstruirse a sí mismo, atisbar una mínima coherencia en los sucesos de su vida. (...) cita no sólo al omnipresente Wittgenstein sino a autores que le han conmovido, Ionesco, Coetzee, Quignard, Magris. (...) El lector se satisface captando velados accidentes y emociones verdaderas y leyendo frases bien puestas, agudas observaciones y palabras que expresan la auténtica intimidad.» Lluís Satorras, El País
«La naturaleza contradictoria del amor y su poder de imantación no pueden conjurarse sin una fingida o conjetural distancia que permita la perspectiva del relato. Pornografía conquista esa distancia por medio de una muy medida y humorosa ironía, que es el antídoto contra el exceso de gravedad o sentimentalismo; por medio de enumeraciones engañosamente neutrales que entrelazan lo trascendente y lo irrelevante; por medio de una magistral naturalidad en el modo de equiparar el valor y el sentido de las palabras propias y de las abundantes citas.» José Saborit, Levante
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